Don Chin o cómo lidiar con una reunión de egresados


Para Eusebio, quien siempre fue alguien sin dejar de ser él.

¿Cuáles son los mejores sentimientos que se esperan obtener de una reunión de ex compañeros? Varias palabras pueden describirlos: Reconocimiento, Alegría, Nostalgia, Pertenencia, Orgullo...Hay que aprender a identificarlos bien, en su justo momento sin dejar que otras cosas los opaquen. Es muy difícil vencer la tentación de caer en manos de "Don Chin..." : Esta señor es una amenaza, pues  si no se está alerta, puede cegar el verdadero valor de este tipo de reuniones, apartándonos de nuestra verdadera forma de ser.

Comentamos lo anterior porque la semana pasada tuvo lugar la reunión de egresados de la escuela de "Comunicación y Diseño" de la Universidad del Mayab; antes llamada, carrera de Ciencias de la Comunicación Social con toda su carga teórica mercicanista por aquello del enfoque funcionalista. Hoy, las fotos de esta reunión ya están circulando, y con los comentarios en las redes sociales el asunto ese del nombrecito posmoderno de "Comunicación y Diseño"  tiene mucho sentido, pues tiene mucho de face, pero nada de book; como dice la publicidad de las librerías Gandhi.

La llegada por la reciente, mejorada avenida que conduce a Chablekal solo fue opacada por dos universitarios que jugaban carreritas.

Chin...qué falta de precaución e imprudencia!

-De qué te quejas, no hacías tú lo mismo?,-me respondí a mí mismo. Ah que Don Chin...

En el costado oriente de la Universidad, en los jardines de dos enormes edificios que no existían hace algunos años se instalaron tantas mesas como generaciones pudieron haber confirmado en la lista de Florángely Herrera Baas. Bajando de mi típica Van familiar, esperaba una mesa ruidosa, pero junto a la música "tecno-punchis" no pudimos distinguir entre estar en una tardeada de Noósfera o en un salón de clases: al fondo, junto al trompo de pastor, me familiaricé con la vista de los linos, de las canas y las caras conocidas, tan solo para atestiguar, como hace veinte años atrás, que en la reunión de ese sábado iba a estar como golondrina sin cable: nadie había de mi generación, la segunda, la que egresó en 1991 y no realizó ningún divertido viaje en crucero con remate de fiesta en Cozumel.




-Chin, si no hubiera perdido un año en Veracruz dizque estudiando, esa generación hubiera sido la mía, pensaba maliciosamente al saludar a mi ex compañera de la especialidad de Sociales en el CUM, la vallisoletana Kembly Puerto Navarrete, de la primera generación; quien dejó lucir su gran experiencia frente a las cámaras con un rollo que dejó sorprendidos a los noveles estudiantes actuales de la carrera. 

-De qué te quejas, si ese año no te preocupaste en lo más mínimo por averiguar qué carrera te interesaba estudiar ,-me respondí a mí mismo.

Antes de pasar a saludar al buen Manuel Mengual Pastrana , antiguo compañero comunicador en varias dependencias de gobierno; me detuve un momento en la mesa de registro para actualizar los datos, pues según la señorita de la mesa, ya estaba en "archivo muerto"...

-Señor, póngase de este lado de la pared, es sólo una foto para actualizar nuestra base de datos...

Chin...como me encabrona que me digan Señor!

-De qué te quejas, no así llamabas a tus maestros, cuando ellos tenían menos años de los que ahora tienes?

-Carlos Gutiérrez Dopazo, fiel a su estilo detallista, notó la incomodidad de la mesa junto al trompo de pastor...Compadre, vamos a buscar otra mesa o pasémonos al frente, nos estamos asando acá...
.
Chin...antes nos valía m...la temperatura siempre y cuando hubiera bebida y comida....

-No seas mezquino, no ves que tu compadre siempre se ha preocupado por la comodidad de los demás, que tú seas rudo y distraído no significa que los demás lo sean...

Así el Dopy me rescató de Don Chin y la humareda y logró ubicar a la primera generación -y su colgate de la segunda- en un espacio aparte, como para invitar al Rector y a la conductora del evento a reconocernos.

-A qué te dedicas ahora?, - Y empieza la sacadera de tarjetas: todos son ahora directores, gerentes o administradores únicos de algo...

-Maaaa...vamos a coleccionar las tarjetas,-dijo.

Y ya de allí a disfrutar: a Jorge Canto Ureña presumiendo el pasar por varias generaciones, a Arminda Ojeda con su intocable, generosa sencillez que siempre le ha caracterizado; a la muy apreciada Cinthia Cámara Cámara, quien tuvo que dejarnos pronto por asuntos personales. Algo que brindó un toque especial a esta reunión fue ver a matrimonios de comunicólogos -algunos de recientes generaciones- y otros más antiguos. Además del de Kembly Puerto y Manuel Mengual ; Eduardo Avila y Gaby Puerto; Memo Fournier y Blanca Ramos; entre otros. 

De la primera generación estuvo también Gina Aguilar, a quien le comenté que trataría de convencer a mi familia sobre la conveniencia de tener dos loros más en la casa; Blanca Martínez, Cristina Correa y Maricruz Avila completaron la conversación que fue tomando variantes que iban desde la vida doméstica, el trato a la pareja, los niños, los autos, el clima, hasta que llegó el Rector a informarnos que en el mes de Mayo darían sendos reconocimientos a egresados destacados.
Más adelante, pudimos observar a Eduardo Mac Swinney, a Manolo Noriega, Virginia Carrillo y Alicia Martínez, estas dos últimas, conocidas primero en el ámbito laboral antes que en la misma Universidad. La tarde comenzaba a declinar cuando llegó Lucila Casares cuya presencia enmarcó el escenario palapesco  de una conversación subida de tono entre "las chispitas cariñositas" de esa generación: Adela Mac Swinney y Pilarín Faller, confirmando el viejo adagio que afirma: "Si no vas a la reunión, serás el notición".



-Ya no hacen novatadas? Preguntó Lucila Casares, con esa sonrisa de maldad, la misma que le recordamos cuando desde el segundo piso, en la biblioteca de la Universidad logró que una lluvia de globos con agua, cayera sobre mis compañeros de clase.



Fue, en efecto, una tarde de luminarias que arropó la evidente ausencia de mi generación, tarde en la que dediqué buena parte del tiempo a justificar esta falta: Es que casi nadie vive en Mérida, es que éramos pocos hombres, es que...justificaciones que ya no eran necesarias cuando una llamada de los organizadores para tomarnos una foto en los nuevos estudios de la Universidad cortó de tajo el ambiente que ya se había formado, pues a partir de allí, inició el éxodo de los ex compañeros.

Luego de tres intentonas de despedida, finalmente arrancamos la camioneta y con gran sorpresa encontramos a una persona que nos pidió un aventón por el rumbo de Liverpool: Se trataba del buen Eusebio, conocido conserje de acrisoladas virtudes  (Significa "El de buenos sentimientos") a quien tuvimos el chance de saludar momentos antes.

Allá la cosa cambió. Dicen que hay momentos en la vida en los que el destino te pone piezas de reflexión al alcance, sólo hay que estar alertas para entenderlas...

-Ninguna generación como las de ustedes me saluda así...Yo todavía me acuerdo de sus nombres y apellidos, incluso me presentan a sus hijos..En cambio las nuevas ni me saludan ni me recuerdan...Ya cambiaron mucho la forma de ser de las gentes...gente que he visto pasar cuando las veo de nuevo en sus reuniones ni me sonríen ni me hablan como ustedes...

Mientras pasábamos bajo el puente y enfilábamos a Mérida, Eusebio hizo un pormenorizado recuento de nombres, apellidos y apodos, inclusive, se acordó de algunos compañeros nuestros que ya se nos adelantaron...

-Me falta poco para ver lo de mi jubilación...ya tengo 24 años..,-comentó.

Y mientras trataba de explicarle la jerga del Seguro Social, las Afores, el Fondo de Retiro por Cesantía o Vejez me di cuenta que aunque mi generación no haya asistido a la reunión, y que por azares del destino no formé parte de la primera; caí en la cuenta de que hace 25 años tuve oportunidad de estudiar con personas que, al igual que Eusebio,  siempre han sido alguien sin dejar de ser ellas mismas, aunque el slogan anzuelo de la Universidad se esfuerce en recordarlo a estas nuevas generaciones posmodernas que por alguna razón, suelen encarecer el precio de una sonrisa y regatearse a sí mismos la grata memoria.


Caí en la cuenta de que la razón por la que se cultivaban buenas amistades entre las generaciones era que a final de cuentas, todos estaban, desde sus respectivos ámbitos, abriendo brecha para las nuevas, formadas por grupos de estudiantes que seguramente nunca conocieron lo que era una máquina de escribir mecánica para poder pasar su materia de periodismo, pero eran lo suficientemente veloces para comunicar lo que les diera la gana actualizando su "nic".

-Es probable que la fiesta continúe en mi casa por la noche,-dijo Dopy.

Chin...Qué envidia. ¿Dónde acabó mi generación?

-De qué te quejas, si de todas formas no te van a dejar ir?



Comentarios

Chino Carajillo ha dicho que…
hola compilla q tal, disculpa solo queria decirte, busque en google una foto de un datsun, quiero usarla en la entrada de mi blog, encontre la tuya y es sorprendentemente parecido al mio (en tributo al cual quiero q aparezca en la entrada, si te molesta o vilo algun derecho de autor por favor avisame e inmediatamente la quitare, muchas gracias.
Anónimo ha dicho que…
spyder ski jackets spyder jackets spyder jackets [url=http://www.spyder--jackets.com/]spyder jackets[/url] www.spyder--jackets.com